martes, 7 de enero de 2014

La Vida de Pi



Hace muy poco tuve una conversación sobre la creencia en la suerte, si era destino, azar, si nuestra cultura nos condiciona a creer o no en poder cambiar nuestra historia…. como siempre, no tengo nada del todo claro, pero esta vez me vuelve a hacer gracia la situación.

Hace como 7 años tuve una conversación sobre la fe, sobre Dios, y las creencias personales con una persona que ha sido durante mucho tiempo bastante significativa. Hasta hoy, la única conversación que he mantenido sobre el tema en la cual me he sentido realmente cómodo expresando mi opinión sobre el tema. Mucho tiempo después, esa persona me recomendó con efusividad que viera “La vida de Pi”. No entendí el porqué de su insistencia. Tenía una idea de la película como una historia fantástica que no contaba nada importante, quizás otra más sobre el cambio climático, jeje.
Todos los años, en la cena de reyes, nos regalamos en una especie de “amigo invisible” una película y este año, justo este año, me tocó la película de Ang Lee.

Hoy la he visto y…
He de decir que ya entiendo porque aquella persona insistía tanto en que la viera, jeje, un personaje que es capaz de entender que ser cristiano, musulmán e hindú y… ¡¡¡no es incompatible!!!

Más allá de esta historia, la trama de la película, me parece especial. Llena de simbolismos y de mensajes ocultos.
Un chaval que, al estilo Big Fish, elige contar una historia de la forma más atractiva.
Espectacular desde el minuto uno, eligiendo la India para contextualizar la historia, espacio que por sí sólo ya da un toque espiritual a cualquier cosa.
Y el análisis de la relación del protagonista consigo mismo, desde que es pequeño y sufre en el colegio por su propio nombre, hasta que es joven y su familia le separa de su entorno.

Tampoco quiero decir mucho más de esta película, simplemente, que me parece que tendría que verse. Asi que…animo a que se haga.

127 minutos de película ganadora de 4 Óscar

Ahí queda

La Noche de Reyes



Es una de las noches más esperadas del año, no sólo por los regalos y los nervios previos, también porque es la noche del cine!

Hace muchos años (no somos capaces de acordar cuántos exactamente) nos reunimos un grupo de amigos para hacer algo que ya se ha convertido en tradición.

Tod@s l@s asistentes compramos una película, cualquiera, sólo hay un requisito. Tiene que ser una película que para ti, el que regala, signifique algo. Al menos esa es la teoría, siempre hay excepciones.
Quedamos en un restaurante y una vez pedida la comida se pasa a la entrega. En ese momento se hace un reparto de nombres de manera anónima. Y seguidamente la entrega una a una de las películas.
Hay años de grandes películas, otros de películas de todos los estilos y calidades, pero siempre hay buenos momentos.

Este año yo regalé “Four Rooms”, película de Tarantino, que forma parte de mi lista de las básicas para una filmoteca casera. Yo recibí “La vida de Pí” y…ya os diré que me pareció.

Ya estoy deseando que llegue la noche de reyes del 2015. Tengo pensada la siguiente para regalar!!!

Ahí queda