viernes, 3 de diciembre de 2010

Permítanme una licencia


Podemos conocer a una persona por su nombre,
se puede conocer a un hombre por su mujer,
incluso conocer a sus hijos nos acercará al pleno conocimiento de este sujeto,
aunque también conocer a sus amigos nos dará una ligera idea de quién era.

Si observamos el curriculum de la persona  se puede saber bastante de su historia,
o si miramos los retratos que hay en el salón de su casa,
los regalos de recordatorios del zaguán que pudo ser un bar,
tomar una naranja del árbol que plantó un hombre, nos puede ayudar a destapar su verdad
o simplemente contar la cantidad de limones que florecen a la semana en su "lunero".

Contar el número de hijos,
o quedarnos con cuántos nietos tiene, puede ayudarnos a hacer una composición de su vida.
incluso donde llega el árbol genealógico con sus biznietos.

La pena es no poder hablar con él ya, porque aclararía todas las historietas que ahora contamos de él.
Sus viajes, sus negocios, sus alegrías, sus penas, sus puntos de apoyo, su GENIO, su visión humana,
sus maneras de tratar a los que podían necesitarle.....


Hoy voy a proponeros una película que creo es perfecta para esta ocasión.



Porque todas las cosas que creemos puedan ser normales, quizás no lo son tanto, e incluso todo aquello que pensamos que son historias imposibles y que nos las cuentan para agrandar la imagen de alguien, también pueden ser verdad.

Porque hoy me creo todas las historias, las viables y las locuras sobre ti, te la dedico.

 Espero algun dia poder mirar atrás en mi vida y tener la suerte de poder decir, "Si señor, Lo hice".


Marcha tranquilo que la función sigue adelante, y tú sigue enseñándonos que la vida es algo que hay que vivirlo con una sonrisa en la cara. Como lo has hecho tu siempre.


 Gracias!

1 comentario:

  1. El pez es tan grande como el cariño que tiene quien escucha y no quien oye. Tú, dentro de dos siglos, nadarás sobre una ballena.

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